
Es muy frecuente que los recién nacidos presenten algún tipo de manchas en la piel.
Según algunas estadísticas hasta el 80% de los recién nacidos presentan alguna mancha. Muchas de ellas desaparecerán, y la gran mayoría no tienen importancia y sólo suponen un problema estético.
Sin querer ser demasiado exhaustivos, podemos clasificar las manchas en dos grupos: De origen en los vasos sanguíneos (y serán de color rosa o rojizo) o de origen en las células pigmentarias de la piel (y serán de color pardo). Aunque hay otras manchas, vamos a repasar las más frecuentes.
Manchas vasculares
Se producen por un desarrollo anormal de los vasos sanguíneos. Su color depende de la profundidad de los vasos sanguíneos afectados y varía desde al rojo, al rosa o al azulado. En este grupo se incluyen:
- Manchas salmón: Es la típica mancha rosa que presentan muchos recién nacidos en los párpados, en la frente o en la nuca. La mayoría desaparecen antes del primer año y no tienen ninguna importancia. Popularmente se llaman “el beso del ángel” o “el picotazo de la cigüeña”.
- Manchas vino de Oporto: Tienen un color más fuerte (tirando más hacia el morado), pueden afectar a cualquier parte del cuerpo, y a veces se asocian a malformaciones en el interior del cuerpo (oculares, intracraneales, óseas, vasculares, etc).
- Hemangiomas: Es una tumoración benigna de los vasos sanguíneos. A veces producen un abultamiento en la piel y su color es rojizo (como una fresa) si son superficiales o violáceo si son profundos. Con mucha frecuencia se localizan en cabeza y cuello, aunque pueden presentarse en cualquier parte del cuerpo. Pueden estar al nacimiento o aparecer en los primeros meses y después comienzan a disminuir su tamaño y blanquearse hasta desaparecer espontáneamente en la mayoría de los casos. A veces requieren tratamiento si provocan problemas en la alimentación, en la visión, o comprimen algún órgano. En el tratamiento se pueden usar fármacos (corticoides, betabloqueantes…), tratamiento con láser, o tratamiento quirúrgico.
Manchas pigmentarias
Se producen por un aumento de las células pigmentarias de la piel, los melanocitos. Las más frecuentes son:
- Mancha mongólica: Es una mancha azulada, que tiene el aspecto de un hematoma. Se localiza más frecuentemente en la zona lumbar y en las nalgas, aunque a veces aparecen en las extremidades. La gran mayoría desaparecen con los años. Se llama así r que es más frecuente en algunas razas, como en los mongoles.
- Manchas café con leche: Son manchas de color marrón claro. Son muy frecuentes y generalmente no tienen importancia a no ser que sean numerosas, ya que pueden ser síntoma de algunos síndromes, como la neurofibromatosis.
- Nevus melanocítico: Son manchas de color marrón oscuro (como pecas), de tamaño a veces grande, y a veces presentan pelo. Dependiendo de su tamaño y de su profundidad en la dermis, pueden tener riesgo de malignizarse con los años, por lo que deben ser vigilados por un dermatólogo.