
La plagiocefalia postural o posicional es una deformidad del cráneo que ocurre con cierta frecuencia en los recién nacidos
consiste en el aplanamiento de la parte trasera del cráneo en uno de sus lados. Suele deberse a la costumbre de dormir sobre ese lado, aunque a veces es consecuencia de una tortícolis congénita. Es importante diferenciarla de un cierre precoz de las suturas craneales (craneosinostosis).
Ese aplanamiento posterolateral tiene como consecuencia que se deforme todo el cráneo, con abombamiento de la frente y asimetría de la cara, con los ojos y las orejas desalineados.
Es importante la detección precoz del problema, ya que tomando las medidas adecuadas el cráneo puede volver a remodelarse, ya que está creciendo los primeros años de vida.
El tratamiento se basa en:
Primero en cambiar el punto de apoyo de la cabeza, para cambiar el punto de máxima presión y que no coincida con la zona aplanada:
- Sentar al niño con frecuencia en la hamaquita, con una inclinación de unos 30º.
- Ponerlo en la hamaquita “castigado de cara a la pared”, para que el niño intente girar la cabeza hacia el otro lado, ya que es donde notará la actividad.
- Cambiarlo cada día de postura al dormir: De un lado, del otro, boca arriba.
- Usar almohadas especiales para plagiocefalia. Tienen forma de donut, dejando sin apoyo la zona aplanada del cráneo.
Segundo: Usar la musculatura del niño para que tracciones de la zona aplanada del cráneo. La forma de hacerlo es poner al niño con frecuencia boca abajo y jugar con él para que intente levantar la cabeza.
Es caso de no mejoría existen tratamientos ortopédicos (bandas compresivas, cascos) que intentan aumentar la presión en las zonas abombadas y dejar libre de presión las zonas aplanadas.